¿Quién no ha sufrido de un orzuelo y sus molestas consecuencias? Los orzuelos son inflamaciones que resultan, no solo incomodos y dolorosos. Además, antiestéticos, afean nuestra mirada y nos hacen desear una rápida solución.
En este caso, existe un tipo de orzuelo que, además, se mantiene más tiempo y que termina por generar un pequeño quiste. Al mismo se le denomina orzuelo enquistado. En este artículo, hacemos referencia a los diferentes mecanismos para tratarlo.
¿Qué encontrarás en este artículo?
¿Qué es un orzuelo?
En líneas generales, se trata de un problema menor originado por la inflamación de las glándulas sebáceas ubicadas en la base de las pestañas o en el propio parpado. No son más que molestias que suelen desaparecer en poco tiempo, pero que generan la necesidad de algunos medios curativos específicos.
¿Cuál es la causa de los orzuelos?
Como ya dijimos, es una infección. La causa habitual está relacionada con el cuidado e higiene de la zona afectada. En función de esto, es posible que sea causado por bacterias como los estafilococos. Asimismo, se pueden presentar inflamaciones crónicas, estrés, incluso cambios hormonales.
El orzuelo enquistado
En este caso, sucede el mismo proceso de inflamación del tejido señalado, pero se agrega su resistencia. Asimismo, podemos apreciar la aparición de una bolita de grasa extremadamente molesta. Pueden ser de carácter externo, como los que se producen en las glándulas de Zeiss o de Mol o los internos, que aparecen en el párpado, en la glándula de Meibomio.
En qué se diferencian los orzuelos normales de los enquistados
Existen algunas condiciones que los diferencian y establecen su gravedad:
- El tiempo de evolución. En el orzuelo normal, el mismo desaparece luego de un tiempo relativamente corto. Por el contrario, el enquistado, pasa por esa primera fase y se convierte en el quiste que lo identifica.
- El orzuelo enquistado suele ser menos doloroso. El normal promueve la aparición del quiste es decir, es una consecuencia del anterior y representa la aparición de la bolita de material sebáceo. Por eso duele menos, pero molesta más y de forma relativamente permanente.
Consecuencias del orzuelo enquistado
Por supuesto que el dolor es lo más representativo. Se trata de una zona en la que los tejidos son muy delicados. Además, el roce constante por la misma molestia incrementa el dolor. La zona se ve rojiza e inflamada. Su desaparición es mucho más lenta que el convencional. En algunas ocasiones, requiere de intervención médica especializada, por su persistencia. Puede producir molestias en la visión, cuando el quiste es lo suficientemente grande. Sin embargo, no es lo más común.
Sí el orzuelo no desaparece
Es el caso precisamente en el que aparece el quiste. En este punto, el orzuelo deja de ser doloroso y se convierte en una masa abultada y de relativa dureza. Es el caso del orzuelo enquistado que requiere algún tipo de intervención.
La detección del orzuelo enquistado
Normalmente, viene precedido del orzuelo convencional. Por ello, la detección es relativamente sencilla porque sucede como consecuencia del anterior y con el paso de los días. Se nota una pequeña protuberancia que suele ser dura al tacto.
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¿Cómo tratar el orzuelo enquistado?
Al no tratarse de un problema grave, si es una molestia que debe ocupar nuestra atención. La razón es sencilla: se encuentra muy cerca de órganos tan sensibles como nuestros ojos. Ahora bien, la primera consideración es que es una infección, ligera, pero persistente. En función de ello, lo trataremos en relación con sus dos evidencias, la inflamación y la infección. Por ello, las medidas adecuadas serán:
- Colocación de compresas calientes en el parpado. Esto aumenta la circulación de sangre y por lo tanto la cicatrización rápida y eficiente.
- La prescripción de antibióticos y antinflamatorios que generalmente son de aplicación tópica.
- En casos extremos, es posible la intervención quirúrgica. Se trata precisamente del quiste resultante pero el mismo, no es un problema relevante, aparte de la evidente molestia que ocasiona. Se trata de una operación ambulatoria, con anestesia local y practicada en condiciones clínicas adecuadas.
El caso de la cirugía de orzuelo enquistado
Como señalamos anteriormente, la operación es solo necesaria cuando el orzuelo no desaparece y termina formando un quiste. Sin embargo, la evaluación por parte de un médico especialista resulta esencial. El procedimiento es relativamente sencillo:
- Se desinfecta el área a intervenir.
- Se aplica anestesia local, particularmente en los borden del parpado afectado.
- Se realiza un corte en la cara interna del parpado.
- A continuación, viene el drenaje la zona afectada. La zona cicatriza por si sola y no suelen existir manejos postoperatorios.
- El cirujano recomienda la aplicación de algunas medicinas como colirios y antiinflamatorios durante al menos una semana.
Como vemos, es muy rápida, sencilla y sin complicaciones posteriores.
Medidas para el manejo del orzuelo enquistado
Si bien no es una molestia grave, si requiere de cuidados asociados a la zona en la que se encuentra. Por ello, son recomendaciones esenciales:
- No auto medicarse, bajo ningún respecto.
- Impedir la manipulación del área sin las debidas medidas de higiene.
- No intentar extirpar el quiste sin la asistencia de un médico especializado.
En efecto, el orzuelo enquistado parece un mal menor, pero, se encuentra en un área sumamente sensible.
