vista borrosaHablamos de una dolencia crónica, que no remite por más esfuerzo que hagamos. Existen numerosos indicios que señalan la presencia de la visión borrosa y causas diversas también. A continuación, te explicamos a qué nos referimos con este tipo de condición y lo que puedes hacer para mejorarla.

¿Qué es la visión borrosa?

La visión borrosa puede ser definida como un conjunto de síntomas, de los que el más representativo es la perdida de agudeza visual. Es decir, ya no somos capaces de ver con la misma claridad que antes. Esto nos indica una situación que la identifica como un problema de carácter progresivo y que aparece bajo determinadas circunstancias.

Indicios de la visión borrosa

Como indicamos en el punto anterior, lo esencial es la perdida de agudeza visual, que puede ser relativa en relación con el correcto funcionamiento del sentido de la vista. En estos casos, las imágenes suelen aparecer como fuera de foco y con una definición opaca, como si faltara luz en los contornos de esta. Asimismo, la persona que la sufre suele ver las imágenes bastante opacas, en referencia con los colores adecuados.

En algunos casos excepcionales, puede aparecer en un solo ojo, limitando la visión de bifocal al hacer mayor esfuerzo con el ojo sano.

Causas de la visión borrosa.

Es un problema de carácter múltiple, son muchas las causas, muchas de ellas asociadas a otras situaciones:

  • Enfermedades relacionadas con problemas de refracción, como miopía, astigmatismo, presbicia. En el caso de la miopía, siempre serán borrosos los objetos lejanos, produciendo imágenes opacas en general a la distancia. Es el defecto de refracción más común y por tanto, la principal causa de visión borrosa.
  • Enfermedades oculares como el pterigion que afectan el enfoque.
  • Problemas neurológicos que limitan el funcionamiento del sistema de visión, sobre todo a nivel de los nervios o de la estructura de los órganos de este.
  • Problemas estructurales como las cataratas también originan una visión borrosa.
  • El embarazo, el cambio hormonal que ese produce, origina algunas implicaciones para la córnea que modifica su espesor y por tanto la capacidad de refracción adecuada de la luz.
  • El síndrome del ojo seco también relaciona una forma de dolencia que termina por afectar la visión.
  • Dolores de cabeza, causados por excesos en el enfoque de objetos pequeños o de tareas que requieren mucha concentración visual.
  • Después de una cirugía ocular, es decir como consecuencia de esta.

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¿Cómo se detecta la visión borrosa?

En todo caso de problemas con la visión, lo esencial e inteligente, es visitar a un oftalmólogo. Otro aspecto para tomar en consideración es que la detección puede ser un problema relativo. Por ejemplo, para una persona joven, la situación será detectada de inmediato, pero en el caso de alguien de más de 40 años, la cuestión es un poco más compleja porque puede confundirse con otras sintomatologías.

Sin embargo, existen algunos exámenes que no solo pueden decirnos si tenemos el problema, sino el grado de este. A través de un examen de la vista completo, se pueden realizar pruebas de sensibilidad al contraste espacial. Se utilizan aparatos especializados como la biomicroscopia y la tabla optométrica de Snellen.

Curando la visión borrosa

Lo primero que debemos entender que es esta no es una dolencia por sí misma, es decir, no es un síndrome particular, sino consecuencia de otros problemas. Por eso, la solución o mejora, depende de la dolencia que la cause. Tenemos entonces una serie de consideraciones en torno a cada situación específica.

  • Problemas de refracción. La solución más común para problemas como miopía, son los lentes o en algunos casos, la cirugía. Existen opciones como las técnicas LASIK o PRK, con comprobada efectividad. Sin embargo, resulta esencial que sea el oftalmólogo quien indique la mejor solución.
  • Presbicia, identificada como un problema de vista cansada, notable sobre todo con la edad, es posible de tratar a través de la asignación de lentes, sobre todo de lectura. Así mismo, se presentan opciones como las incrustaciones corneales, queratoplastia conductiva y otras técnicas quirúrgicas especializadas.
  • Síndrome de ojo seco. Se puede usar gotas lubricantes, además de medicación especializada. De nuevo, el mejor consejo es que la misma sea consultada y aprobada por un médico especialista.
  • En el caso de las migrañas por problemas de enfoque, lo ideal es el descanso, porque generalmente son situaciones puntuales que deben pasar relativamente rápido. De persistir, la consulta no debe tardarse porque es un indicio de algo que funciona de manera inadecuada.
  • Por su parte, cuando la visión borrosa se verifica luego de una intervención quirúrgica, es necesario en primer lugar, guardar el reposo correspondiente. Asimismo, el médico tratante recetará los medicamentos necesarios para disminuir las consecuencias asociadas a la intervención.

Finalmente, no debemos olvidar que este tipo de problemas pueden aparecer por muchas causas y no debemos tomarlas a la ligera. Lo mejor es que cuando sintamos algún tipo de molestia en el enfoque o claridad de las imágenes, acudamos a nuestro oftalmólogo de confianza para realizar pruebas de descarte.

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¿Quien es el autor?

Dra. Diana Parra

Dra. Diana Parra

Oftalmólogo Certificado
Experta en Cirugía Láser

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